Fuente: Pulso – Diario de San Luis
Las celdas solares flexibles son plásticos desplegables, para exponerlos a la luz y hacer de generador de energía portables, a partir de nanoantenas, un material aplicado en un proyecto pionero en México y que sólo tres grupos de investigadores en el mundo los están trabajando: en Barcelona, España; Estados Unidos de América y en la UASLP.
Las celdas solares convencionales, explica el Dr. Francisco Javier González Contreras, aprovechan el espectro de luz; las nanoantenas pueden generar electricidad con cualquier tipo de energía electromagnética, por ejemplo, la radiación calorífica emitida por el cuerpo humano.
Agregó: “Una de las ventajas de las nanoantenas sobre las celdas solares convencionales es que se pueden utilizar a frecuencias bajas, es decir, longitudes de onda más altas y así aprovechar la energía que generalmente es desaprovechada por las celdas solares convencionales”.
Expuso: “Lo que pretendemos es sintonizar las antenas para que aprovechen esa parte que es desperdiciada con la ventaja de que este tipo de antenas se pueden fabricar en sustratos flexibles, y por ejemplo hacer una etiqueta, coser en la ropa, o hacer un tapete que lo extiendes en el desierto y donde se puede cargar el teléfono celular, radio”.
Se encuentran en trámites avanzados para patentar este proyecto de investigación básica y aplicada.